Me llamo Fernando y tengo 22 años. Soy ingeniero de Software, y como tal me gusta todo lo relacionado con ordenadores, Internet, móviles, tecnología… aunque también me gusta bastante la naturaleza, los parques… la tranquilidad al fin y al cabo.
Mis colores favoritos son el amarillo y el negro, no me gusta nada mi nombre y odio lo que a los chicos les suele encantar (coches, deportes, fiestas…), lo que siempre ha hecho que me lleve mejor con las chicas. También me considero bastante friki: me gusta el manga, los cómics, los animes, los videojuegos (esto cada vez menos) y demás cosas que no todo el mundo considera normales.
No me considero ni guapo ni atractivo, soy muy curioso, tengo mucha paciencia, soy muy sensible (demasiado sensible) y es difícil verme enfadado (y de estarlo, no tarda mucho en pasarse). No considero que tenga nada especial ni que destaque en ningún aspecto; la gente suele decir que soy listo e inteligente, pero yo no lo considero para nada. Si tuviera que apuntar en una lista a toda la gente que me importa, el último de todos sería yo.
Hace muchísimos años era una persona totalmente distinta: siempre alegre, muy habladora, bromista…
Supongo que es cierto que el dolor te cambia, y yo llevo ya mucho acumulado. Hoy en día soy prácticamente todo lo contrario: me deprimo con facilidad, no me gusta hablar, soy muy cortado, solo me siento a gusto con pocas personas…Únicamente consigo volver a ser como antes con ciertas personas, y aun así no es del todo igual.
Ya que no hablo mucho, se me da muy bien escuchar, aunque supongo que luego no se animar o dar buenos consejos.
Creo que nunca he tenido amigos de verdad. Creía que si, pero a la hora de la verdad siempre te acaban dando de lado por una razón o por otra, por lo que ya no creo demasiado en la amistad. Solo hay una persona hoy en día a la que de verdad me atrevo a llamar amiga, ya que es la única que de verdad ha estado ahí en los peores momentos de mi vida (se que leerás esto “perdidita”, muchas gracias por ayudarme siempre que puedes).
Igual que con los amigos, me pasa igual con el amor. Creo que ya no me lo creo.
He estado enamorado 3 veces en mi vida. No un amor como los de hoy en día, o de verano…No, un amor de dar incluso la vida por la otra persona.
¿Y para que han servido? Para nada. Para sufrir solamente. Y lo peor de todo es que soy lo suficientemente gilipollas para seguir queriendola...
Al menos del último (al contrario que con los anteriores) si que me llevo buenos recuerdos y buenas experiencias, aunque también mucha mas tristeza que en los anteriores.
Supongo que la culpa fue mía, por creerme que cada vez que me decían “te quiero”, “lo eres todo”, “me completas”, “no podría vivir sin ti”…iba totalmente en serio. Yo cuando decía esas cosas, si que las decía con el corazón y con la intención de que fueran para toda la vida, pero supongo que todo el mundo no es igual…
Realmente creo que poco más se puede decir de mi vida. Simplemente es una montaña rusa con breves subidas de alegría, interminables bajadas de tristeza, pequeños tramos de tranquilidad, y continuos baches en el camino.
Es tan corto el amor y tan largo el olvido...
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