lunes, 10 de enero de 2011

Cuando el amor se hace dolor, pero sigue siendo amor



Duele, quema por dentro ver como pasan los días, los años... y todo sigue igual. Siempre invadido por la monotonía, solo pensando en ti, siempre soñando contigo.
Ilusiones que son rotas por el amor, un amor que no es magia, es veneno. Un amor doloroso que se apodera de ti, te consume y te va destruyendo poco a poco.
Momentos en que piensas: “no todo esta acabado, puedo hacerlo". Pero luego bajas de las nubes y caes al suelo de golpe, y es cuando sabes que no significas nada para esa persona, que solo estáis separados por centímetros que en realidad forman un abismo insalvable, que tú estas a su lado y aun así eres un desconocido.
Porque da igual que esa otra persona no sienta lo mismo, da igual el sufrimiento, porque esa persona es todo para ti, y da igual intentar evitarlo, porque es imposible pedirle a la razón dejar de sentir lo que sentimos.
Sentimientos...cuando te saluda, cuando la ves en una foto, cuando la encuentras de casualidad, cuando hace ese gesto que la identifica, cuando te mira a los ojos y esboza una sonrisa, esa sonrisa perfecta que te da la vida, que es luz en un día totalmente oscuro.
Sentimientos imposibles de borrar, que están siempre en tu mente, que son a la vez bendición y maldición, que son la causa de tus lagrimas y a la vez la única causa de que sonrías…


Porque el amor cuando no muere, mata. Porque amores que matan, nunca mueren

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